El próximo 14 de abril comenzará la octava y última temporada de Game of Thrones, fanáticos de todo el mundo han esperado por más de un año por este día y desde ya, la serie parece traer grandes sorpresas y desenlaces inesperados.
Uno de los personajes con mayor fuerza es el de Daenerys Targaryen, interpretado por la actriz Emilia Clarke; la actriz que ha sido nominada tres veces por su actuación a los Premios Primetime Emmy en la categoría de mejor actriz de reparto en Serie dramática, se ha ido ganando el corazón de los fanáticos de la serie alrededor del mundo y ciertamente, ya no podemos imaginarnos esta serie sin la madre de los dragones; sin embargo no todo es color de rosa en la vida de la actriz y hace poco reveló en un relato entregado a la revista The Newyorker, un suceso que casi le hace perder la vida.
Al terminar de filmar la primera temporada de Game of Thrones, la actriz que en ese entonces tenía 24 años, sufrió dos graves aneurismas que casi le hacen perder la vida. Al hablar de esta experiencia aseguró lo difícil que fue atravesar por esta situación y también dio una voz de esperanza a las personas con cuadros similares; la actriz contó que quiere crear una fundación para ayudar a personas que sufran de enfermedades neurológicas.
El 11 de febrero de 2011, Clarke se encontraba en el gimnasio cuando comenzó a sentir un fuerte dolor de cabeza, unos minutos más tarde la actriz empezó a sentir náuseas y allí se dio cuenta de los peor: algo andaba mal con su cerebro. El personal del gimnasio llamó a una ambulancia y de ahí en adelante las cosas fueron borrosas para la actriz.
Al llegar al hospital, su pronóstico era incierto, pero al realizarle una resonancia magnética se dieron cuenta que había sufrido un accidente cerebrovascular, potencialmente mortal, producido por la ruptura de un aneurisma. Emilia afirmó: «Si quería vivir y evitar secuelas terribles, tenía que someterme a una cirugía urgente».
Los médicos dijeron que el tiempo crítico después de la intervención era de dos semanas, si lograba superarlos, existía la posibilidad de recuperarse sin problemas. Emilia cuenta que lo primero que le preguntaron fue su nombre el cual no recordó, momento que describe como el más aterrador de su vida; además contó: «Yo soy actriz, necesito recordar mis textos y ahora no podía recordar ni mi nombre. En mis peores momentos, llegué a pedir a los médicos que me dejaran morir. Mi trabajo, todos mis sueños, están centrados en el lenguaje y en la comunicación. Sin eso, estaba perdida».
Tras un mes de recuperación, volvió a su rutina, a tiempo para el inicio de la nueva temporada de la serie, pero los nervios y el cansancio la hacían tomar morfina entre entrevistas.
Al terminar la tercera temporada, la actriz se sometió a una segunda cirugía, la cual falló, la actriz contó sobre ese momento: «Cuando me despertaron, gritaba de dolor. El procedimiento había fallado. Tuve una hemorragia masiva y los médicos me dijeron que mis probabilidades de sobrevivir eran escasas si no volvían a operar».
La actriz concluyó su relato agradeciendo a quienes estuvieron con ella en estos momentos, con estas palabras: «Les doy las gracias a mi madre y mi hermano, a mis médicos y enfermeras, a mis amigos. Todos los días echo de menos a mi padre, que murió de cáncer en 2016 y a quien nunca podré agradecer lo suficiente que me sostuviera la mano hasta el final».
Los fanáticos de la actriz no fueron ajenos a este relato y dejaron sus mensajes de apoyo a través de su cuenta en Instagram, a lo que Clarke se mostró muy emocionada y publicó un video para agradecer a todos sus seguidores.
Nosotros nos alegramos, que la actriz se haya recuperado completamente y podamos seguir disfrutando de su interpretación no solamente como Daenerys Targaryen, si no que esperamos verla en muchos papeles más.